A veces, cuando tenemos problemas con el dinero, tendemos a culpabilizarlo y echamos balones fuera. Pero el dinero no es más que una herramienta neutral, de hecho, no hay nada más neutral que el dinero.
Deja un billete sobre una mesa y míralo atentamente: pronto comprobarás que no hace nada. El dinero es neutro, no hace ni deja de hacer nada. Es potencialidad pura: el dinero tiene la capacidad de convertirse en cualquier cosa. Puede usarse para salvar la vida de una persona pero también para acabar con ella, todo depende del uso que se le dé al dinero.
Muchas personas intuyen que algo va mal con el dinero, pero en realidad lo que va mal es la forma en la que nos relacionamos con éste.
Hay cierta tendencia a considerar que el dinero tiene la capacidad de estropear a las personas. Sin embargo no es más que una herramienta neutra que no tiene capacidad de hacer ni bien ni mal a nadie y que sólo se convierte en lo que la persona que paga y la persona que acepta el pago deciden hacer en ese momento.
Eres tú el que determina en qué se convierte el dinero.
Un alicate o un automóvil también son herramientas, y no se suele decir de ellas que hayan estropeado a nadie. Un alicate no puede estropear a nadie; el dinero tampoco. Y como cualquier otra herramienta, el dinero puede ser empleado para hacer el bien o para hacer el mal.
Al fin y al cabo, si no quieres tener problemas con el dinero lo mejor que puedes hacer es informarte y aprender cómo debes relacionarte con él y cuáles son las emociones, que desde tu interior, te impiden tener una economía saneada.
Y si quieres seguir reflexionando sobre esta idea, te invitamos a visualizar la siguiente conferencia en la que Sergio Fernández comparte las cuatro emociones que te alejan del dinero:
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El Equipo de Máster de Emprendedores
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